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De la serie Personajes Ilustres de la Fórmula 1: | |||
Dietrich Mateschitz | |||
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Nacionalidad: | Austríaco | ||
Profesión: | Dueño de Red Mul y Toro Rossa | ||
Papel en la F1: | Comprar equipos | ||
¿Malo o bueno? | Digamos que normalito | ||
Logros en la F1: | Las victorias con Red Mul y Toro Locco y el fichaje de Vettel | ||
Crímenes que se le atribuyen: | El fichaje de Sébastien Buemi y el no fichaje de Super Sato | ||
Su especialidad: | Comprar equipos, empresas y todo lo que se le ponga por delante | ||
Notas | Tiene hasta una isla |
«Sato lo hacía bien, pero habría empezado donde empezó Bourdais el año pasado»
~ Dietrich Mateschitz cuando cometió su mayor error
«Ahí tienen a Masterchit»
~ Calvo de Antena 3 refiriéndose a Mateschitz
Dietrich Mateschitz es un pijo forrado magnate obsesionado con los toros, propietario de la marca Red Bull y de los equipos Red Bull Racing y Scuderia Toro Rosso de Fórmula 1. Él es una parte importante en el proceso de selección del piloto que le caiga mejor y/o soborne más que más le convenza para incorporarse a sus escuderías. Todo empezó un día en Tailandia, donde descubrió una bebida venenosa energética. Se le ocurrió venderla y así, sin darse cuenta ni saber muy bien por qué, se acabó forrando. Basta decir que tiene tanta pa$ta como Bernie Ecclestone.
Allá por el año 2004, Mateschitz, que ya estaba metido en cantidá de negocios ilegales, decidió meterse en el mundo de las drogas del Gran Circo mediante la adquisición de la escudería Jaguar Racing. El equipo se renombró como Red Bull Racing y consiguieron algunos puntillos en su primer año.
No contento con tener una escudería en la F1, Mateschitz decidió hacer otro chanchullo comprar un segundo equipo: el deprimente modesto Minardi, que desde entonces sería conocido como Scuderia Toro Rosso, para usarla a modo de banco de pruebas de zoquetes jóvenes promesas en 2006. Red Mul empeoró respecto a su año de debut, mientras Toro Rosso siguió la línea de Min-arde y hizo el ridículo sólo logró un punto, con lo que Mateschitz se cagó en todo amenazó a los pilotos con obligarles a beber mil latas de Red Bull sin parar para mear. Al final, acabó despidiendo a Scott Speed y Christian Klien para fichar a Mark Webber y Sebastian Vettel, salvando así los muebles en la temporada 2007. En 2008, Red Bull consigue unos resultados similares a los de 2007, mientras Toro Rossa expermientaba una clara mejoría de la mano del futuro Dios Vettelalamierda.
Actualmente, Red Bull ha conseguido fabricar un coche ganador y sobre todo de la mano de Vettel protagonizó un exitoso año ya en 2009. Por su parte, Toro Locco hizo el idiota empeoró notablemente sus prestaciones, ya que enchufó a Sébastien Buemi en detrimento de Super Sato. Es por eso que quiere tirar a la basura vender la escudería italiana. En 2010 sí que fue la vencida y ganaron el mundial con Váteres y Orina de Chuck.
Ordenados de menor a mayor:
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